24. Cerrando una etapa

Han pasado los meses y estaba muy cerca la boda de Lucas y Joana. Jordan ya ha tenido a su pequeño Taro, ¡mi peque ya tiene compi de batallas!

Nos fuimos todos juntos a Monte Komorebi a pasar unos días antes de la boda, ellos estaban liados con los preparativos así que no se pudieron apuntar.

Coral y Alaris también vinieron, por fin él se había liberado de todo. No fue fácil, fue duro, pero finalmente era LIBRE.

Ahora son un par de VeguiVampis, me meo cuando se llaman así… Me impactó saber que una de mis mejores amigas ahora era inmortal, ya no era humana, pero todo y con eso… Seguía siendo mi loca de siempre. Ya podía ser todo lo “no humana” que quisiera que habían cosas que no cambiaban.

Cuando Lilith convirtió a Coral desató la ira del Clan Straud, pero nuestro amigo cogió al fin el toro por los cuernos, él era muy superior y derrotó a Vlad. A partir de ese momento ganó su libertad y la de su familia, nunca más los volverán a molestar. No quieren crear un Clan, solo quieren ser una familia normal.

Naos y Liliam fueron a Sixam. Todo salió bien (menos mal…), Liliam se quitó el peso que llevaba cargando desde que marchó, y sorprendentemente, sus padres se alegraron por ella, de haber tenido el valor de vivir su vida, de cortar con todo y luchar por lo que ella realmente deseaba. Se llevó un abrazo y volvió a Tierrasims, su hogar.

Esta vez no nos han acompañado, sabía yo que estos dos no iban a tardar en hacerme tío y no me equivocaba, Liliam está en su primer trimestre de embarazo y lo está llevando fatal, náuseas constantes, cansancio, mareos… Vamos, que la pobre está hecha un cromo. Así que aviones ¡ni pensarlo!

Aprovechando que estábamos en Komorebi, fuimos a visitar a Brian y su chica.

Brian: ¿Dónde está mi niña favoritaaaaa?

Malena: ¡Venga ya Brian! Que ya no soy una niña…

Brian: ¿Cómo? ¡Pero si no te lo decía a ti! ¡Se lo decía a la pequeñaja! Chica, desde que tengo sobri que tú has pasado a un segundo plano, I’m Sorry… ¡Trae aquí!

Me puse a reír como nunca, pobre Malena, que tirada la había dejado…

Malena: ¡Zuria! ¡Pero tú no te rías encima!

Brian: Anda culo bonito, que aún vas a tener a mi hermana de morros todo el día… Pasad, pasad…

Malena entró y lo primero que hizo fue abrazar a su cuñada, Brian se puso a jugar como un loco con Alani, la peque se lo estaba pasando en grande, abracé yo también a Saya y nos pusimos a charlar mientras Brian seguía haciéndole perrerías a la peque.

Brian: ¡Guau! ¡Esta enana es de las mías! ¡Es incansable!

Zuria: Si Brian si… Puedo asegurarte que esta niña no para… creo que ni durmiendo está tranquila… Más de una regañina se ha llevado ya.

Y fue justo decir eso que la señorita ya la estaba liando por detrás de su tío, así que me tocó ir a pegarle el sermón mientras el tío se reía… No ayudas Brian, no ayudas… 😒

Por la tarde nos fuimos a las pistas de esquí, dios… Aún recuerdo los porrazos que me pegué esquiando, mi “culo bonito” también se acordaba, así que con la excusa de la peque, aquí el menda se ha pillado un trineo y cuesta abajo que me fui con Alani, ¡la muy bicho se lo estaba pasando bomba! La verdad es que los dos disfrutamos como unos enanos. Malena también se escaqueó de su hermano en cuanto pudo y se vino con nosotros a montar en trineo.

Fuimos a dar un paseo por la montaña y en cuanto empezó a anochecer nos despedimos de Brian y Saya. Pusimos rumbo a la casita donde estábamos hospedados. Allí ya estaba Taro esperando a Alani para seguir jugando. Qué recuerdos me traía verlos jugar juntos, me senté a mirarlos y al poquito Jordan se sentó a mi lado.

Jordan: Quien nos iba a decir que nuestros hijos jugarían como lo hacíamos nosotros tiempo atrás…

Zuria: Que fuerte ¿Verdad? Me alegra seguir teniéndote a mi lado Jordan.

Jordan: A mí también Zuria… A mí también.

Ya era tarde, así que mientras Malena hacía la cena, bañé a la peque. Después de cenar todos puse a Alani en su orinal para que hiciese su pipí de antes de dormir y luego a su camita con un cuento de un robot chiquitito que quería descubrir el mundo. Malena se quedó mirando cómo le leía.

Cuando terminé me abrazó.

Malena: Alani no podía tener mejor papá…

Zuria: Si… Mejor yo que el “armario empotrado” la verdad… Menudo tío…

Malena: Veo que el amor entre los dos era mutuo eeeh… Él a ti tampoco te tragaba…

Zuria: Me dio esa ligera impresión cuando hablé con él… Si…

Terminamos en la cama entre besos y caricias.

Cargamos pilas, disfrutamos del tiempo juntos y por fin llegó el gran día de nuestros amigos. La boda fue en el mismo lugar donde tiempo atrás se casaron Jhony e Izzy, los papás de Joana, además, ellos viven en San Myshuno así que ¿qué mejor lugar?

Fue una ceremonia muy bonita y los novios estaban espectaculares. Nos lo pasamos en grande. Ya solo nos faltaban Coral y Alaris por casar del grupo, pero ellos tenían muy claro que tenían toda la eternidad para formalizar su relación y que no estaban por la labor. Se les escapa un pequeño detalle… Nosotros no tenemos toda la eternidad… ¡jum! 😤

Alani y Taro estuvieron haciendo el trasto durante toooodo el día, ¡son agotadores! Que si regañina por aquí, que si juegos por allá, que si corre pal orinal que se hace pipí, que si venga a juguetear con la comida… ¿Quién me iba a decir a mí que esto de ser papá iba a ser tan cansado? 😅 Esto mi padre no me lo había contado… O yo fui muy bueno, ¡una de dos! Ni un rato pudimos tener Malena y yo de disfrutar juntos del día, pero en fin, es lo que tiene esta nueva etapa en nuestras vidas. Llegará el día en que lo echaremos de menos, seguro.

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¡Hoy ha sido un gran día! ¡SOY TÍO! ¡Ha nacido la pequeña Andrómeda! Liliam la ha tenido en casa (por razones obvias) y es una criaturita extraordinaria, Alani ahora es un poquito más consciente de todo, va a ser la prima mayor y se miraba a la pequeñina con cara de asombro… Tal vez no ayudaba mucho el color de su piel (aun no puede camuflarse) pero estoy seguro que cuando sea un poquito mayor y le expliquemos todo, entenderá mucho mejor.

¡Tres meses! Tres meses han pasado desde que Lucas y Joana se casaron y ya tenemos noticia de embarazo. Si, si, Joana espera su primer bebé, estos dos no perdieron el tiempo en su luna de miel ¡jajaja! 😂, pero además tenemos noticia por partida doble porque resulta que Alaris y Coral también esperan retoño ¡que locura por dios!

En estos momentos me entra la morriña y me encantaría que Malena volviera a estar embarazada, disfrutar de ese embarazo como no lo hice con el de Alani… Pero luego miro a nuestro trasto y se me pasa la tontería… Mejor esperar a que sea un poquito más mayor…

Sé que últimamente no escribo mucho, pero la vida no me da para más, en el trabajo voy a tope, desde que soy Médico de Urgencias que la faena se ha multiplicado. Cuando tengo días libres no puedo evitar disfrutar de mi peque, se hace grande demasiado rápido… Y también debo dedicarle tiempo a Malena. Entre la pitufa y el curro de ambos pasamos poco tiempo juntos.

Últimamente se queda despierta hasta que yo llego para poder charlar mientras ceno y disfrutar un poco de caricias y besos antes de quedarnos fritos… Que lejos quedan los días de pasión desenfrenada que nos traíamos…

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¡Hoy he preparado una quedada de infantes! Joana y Coral ya han tenido a sus peques, Victor y Layla, pero todavía no los habíamos podido conocer, así que ¿Qué mejor manera de conocerlos que creando este acontecimiento?

Han venido a Windenburg, lo hemos hecho en el parque que tenemos cerquita de casa, ¡tenía ganas de que Alani y Taro conocieran a sus nuevos amiguitos!

¡Ha sido una tarde de locos! Tanto peque suelto, madre mía… hemos tenido poco tiempo para ponernos al día… Yo y Malena detrás de Alani, Andrómeda era otro bicho de cuidado, Naos se hacía cruces de cómo había salido tan revoltosa. Taro y Victor eran los más tranquilos de todos, jugando en el parquecito sin rechistar (¡joé, que suerte han tenido!) y bueno…

Layla… Es una mini Coral en toda regla, en el carácter no ha sacado absolutamente nada de Alaris, con lo tranquilo y bonachón que es él… Pobre hombre, le ha tocado sufrir a su mujer por partida doble ¡jajajaja! 🤣

Y aunque hemos terminado agotados de la quedada la verdad es que ha sido genial, volver a vernos todos, Alani ha jugado muchísimo con sus amiguitos… Hemos llegado a casa y ni ganas de cenar tenía la peque, en cuanto la hemos bañado se ha quedado frita en el sofá con Malena.

Estoy orgulloso de finalmente tener la familia que deseaba. He tenido mis idas y venidas, he complicado las cosas más de lo necesario en infinitas ocasiones, pero de todo se saca una lección, un aprendizaje.

Mi lección: No te dejes nada dentro, habla, explica lo que sientes, no te lo guardes por miedo al rechazo, a que te hieran, porque muchas veces ese silencio, ese “no me atrevo”, es lo que realmente te hiere, lo que no te deja avanzar.

Ahora toca que Alani crezca y espero poder ayudarla a conseguir todo lo que se proponga en esta vida, con sabios consejos como los que me ha dado mi padre.